La playa de los inútiles

«Me llamo Sofía. Tengo once años y medio y de mayor quiero ser inútil». Sí, así comienza, y tras esa primera frase, todo el relato mantiene el mismo ritmo seductor, inocente y estimulante. La playa de los inútiles es la reivindicación del tiempo contemplativo, la euforia sensorial de dejarse atrapar por el bucolismo del arrullo del mar, o la felicidad de montar  en bici sin saber a dónde llevará el camino mientras la brisa te acaricia la cara y sientes el impulso de levantar los brazos y alzar el vuelo. O, la alegría de disfrutar, como Sofía, de los cuadros de Kandinsky o la música de Mozart.??

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Este libro es una invitación a refexionar sobre lo útil y lo inútil, o mejor dicho sobre la frenética insistencia de este mundo consumista, en priorizar la utilidad de las cosas como baremo del sentido de emplear tiempo en ellas ¿es sensata una sociedad que privilegia una productividad más centrada en "cómo ganarse la vida" que en vivirla?. Una lectura ideal para lectores a partir de 8-10 años, y necesaria en lectores adolescentes.??